En primer lugar, si bien hay mucha información sobre la etapa de embarazo y el momento de dar a luz, también hay muchos temas de los cuales no se habla públicamente porque se consideran vergonzosos. Esto lleva a que se creen prejuicios en torno a ciertas experiencias que son completamente normales. Tabúes sobre el embarazo y el parto
Si pasas por algunos de las siguientes situaciones, olvídate de la culpa y considéralo como algo natural, ya que hace parte del proceso y no afecta de ninguna manera tu bienestar ni el desarrollo normal de tu bebé.
Desde el inicio de la gestación, tu cuerpo empieza a funcionar diferente y se presentan las alteraciones hormonales dando lugar a muchos cambios físicos que pueden llegar a ser incómodos. además, también
Además de sensibilidad en los senos debido a que tu cuerpo se prepara para la lactancia, también puedes experimentar aumento del flujo vaginal, la aparición de vello en lugares como el rostro o la panza y el incremento de este en otras partes del cuerpo como la zona vulvar. Pero no te preocupes, después del parto tu cuerpo empieza a regularse nuevamente y empiezan a desaparecer estos efectos.
A medida que avancen los meses de tu embarazo y tu pancita crezca, la vejiga estará más apretada, por lo que será más difícil controlar las ganas de orinar y puedes presentar fugas repentinas de orina, sobre todo al hacer esfuerzo o reírte.
Tu sistema digestivo también se altera debido a los cambios hormonales y, además de estreñimiento, se presentan aumento de las flatulencias. Como no tienes el mismo control sobre tus esfínteres debido a la presión del bebé sobre el piso pélvico, es más difícil dominar su escape lo que resulta a veces inoportuno.
Igualmente pueden presentarse hemorroides, debido al estreñimiento y el esfuerzo. Por ello es indispensable una dieta alta en fibra y mantener una constante hidratación para aliviar estas molestias.
Debes saber que es algo que los médicos y enfermeras consideran absolutamente natural y que ocurre en muchas labores de parto vaginal. Al momento de pujar se requiere un esfuerzo enorme para ayudar a la salida de tu bebé, esto puede hacer que expulses heces de forma involuntaria, lo cual no afecta el bienestar de tu bebé ya que el personal encargado de acompañarte está preparado y limpiará la zona de inmediato.
Puede resultar vergonzoso, pero es solo una consecuencia del esfuerzo que haces para que tu bebé salga sin complicaciones, no sientas penas por ello y no aguantes las ganas pues puede afectar el pujo y la salida del bebé.
Se habla de dolor durante la inserción, pérdida de sensibilidad durante el nacimiento o incluso consecuencias más graves para la salud de la mamá y el bebé. Si bien la inserción de la aguja puede causar algo de molestia, no es algo que llegue a ser insoportable, una vez aplicada empezarás a sentir sus efectos unos 10 o 15 minutos después.
En relación al esfuerzo en el momento del parto, la epidural no disminuirá tu capacidad para llevar acabo tu labor de pujar. Por lo tanto simplemente esta se encarga de hacerte sentir más relajada ante los dolores que experimentas durante las contracciones, pero al momento de dar a luz no impide que realices el esfuerzo que se requiere para la salida del bebé.
Además aunque muchas de estas situaciones pueden ser incómodas o molestas, ten en cuenta que es algo que experimentan la mayoría de las mamás en su etapa de embarazo o en su labor de parto. Consultar o hablar con alguien estos temas te ayudará a verlo como algo normal y eliminar tabúes, y si bien no todos los efectos se pueden llegar a disfrutar, sí puede disminuirse la sensación de desagrado al aceptarlo como algo natural.
Esta información «Tabúes sobre el embarazo y el parto» ha sido elaborada bajo las respectivas recomendaciones de nuestra embajadora Paola Pimiento Enfermera – UIS Máster en Enfermería Obstétrica
PAOLA PIMIENTO
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